RECORDANDO
Pensando en el BDMS y mis comienzos como sumisa, recuerdo a mi primer Amo con una relación real, él me enseñó lo que ahora aún conservo, lo que para mi es la esencia de la sumisión, con sus doctrinas basadas en la Old Guard o Vieja Escuela… esas que hoy veo un tanto perdidas y distorsionadas en este nuestro mundillo bedesemero.
Esa esencia en la que mi fin era hacerle feliz de la forma que él quisiera, en la que mi dolor era la demostración de amor y
adoración hacia él, en la que su protección me hacía fuerte, el trato del “Usted”, esos gestos de ternura, esas posturas de recibimiento, entrega, exposición, los deberes, los correctivos, los castigos… la necesidad de ÉL, la espera y un sin fin de detalles que ahora se me escapan.
Hoy en día le doy las gracias a Él y a los que posteriormente tuve. de los cuales siempre me quedé con alguna pieza más de la que forman este interminable puzzle.
Pero… ¿dónde ha quedado todo eso? Me resulta triste que la esencia se pierda, que hoy en día se vea el BDSM como algo liviano donde algun@s lo tomen como un camino fácil para encontrar sexo, donde cualquiera puede adoptar el rol de Dom sin tener constancia de lo que eso conlleva no más para descargar sus frustraciones mundanas, no… no me olvido del rol del sum, también l@s hay que no tienen constancia de lo que ello significa y buscan un tipo de sexo diferente. Algun@s vulnerables, con traumas, que necesitan la protección y ayuda de un o una Dom que le guie y le haga fuerte y no siempre tienen la suerte de caer en buenas manos.
_NeFeR_