Sobre el fetichismo suelen decirse muchas tonterías… Esos sexólogos de andar por casa que consideran perverso todo aquello que no sea la posición del misionero, tienen buena culpa de ello.

Convertir en enfermizo lo que se aparta de lo normativo conduce a la vergüenza y a la frustración. El sexo nunca es enfermizo y sólo es ilegal en aquellos aspectos ampliamente tipificados en el Código Penal. Lo demás, es puro cuento.

Mi experiencia personal me dice que hay tantos fetichistas como personas. Todos (y todas) tenemos en nuestro armario íntimo un oscuro objeto de deseo. Y eso nos hace diferentes, únicos y especiales. No hay motivo para ocultar algo que enriquece y alimenta el fuego de nuestra sexualidad. Sin embargo, poca gente se atreve a reconocerlo. Los fetichismos se llevan muy en privado, con cierta sensación de vergüenza y, muy a menudo, ni siquiera se comparte con la pareja.

Por eso hoy, “Día Internacional del Fetichismo” queremos transmitir un mensaje positivo para perder el miedo a eso que tanto nos excita y estimula y para normalizarlo y visualizarlo. Sintámonos orgullosos de nuestros fetichismos y consideremos que somos afortunados por ampliar el espectro de nuestro deseo y hacer de nuestra vida sexual un espacio creativo y personal.

Y sí, yo también soy fetichista y estoy muy orgulloso de ello.

Ilustración: Sergio Bleda.